Abel SanchezAbel Sánchez (subtitulada Una historia de pasión) es una novela escrita por Miguel de Unamuno en 1917. Aunque su estilo es más realista que la de sus nivolas, en ella pueden encontrarse los rasgos fundamentales de la narrativa unamuniana. |
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Ya sabes lo que decía Oscar Wilde, o quien fuese: que toda mujer es una esfinge sin secreto; Pues Helena parece tenerlo. Debe de querer a otro, aunque este no lo sepa: Estoy seguro de que quiere a otro.
Ya sabes lo que decía Oscar Wilde, o quien fuese: que toda mujer es una esfinge sin secreto; Pues Helena parece tenerlo. Debe de querer a otro, aunque este no lo sepa: Estoy seguro de que quiere a otro.
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¡Es que esa mujer está jugando conmigo! Es que no es noble jugar así con un hombre, como yo, franco, leal, abierto... ¡Pero si vieras qué hermosa está! ¡Y cuánto más fría y más desdeñosa se pone más hermosa!
¡Es que esa mujer está jugando conmigo! Es que no es noble jugar así con un hombre, como yo, franco, leal, abierto... ¡Pero si vieras qué hermosa está! ¡Y cuánto más fría y más desdeñosa se pone más hermosa!
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Sí, no soy simpático a nadie; nací condenado. Te juro, Joaquín... ¡No jures! Te juro que si en mí solo consistiese, Helena sería tu novia, y mañana tu mujer. Si pudiese cedértela... Me la venderías por un plato de lentejas, ...
Sí, no soy simpático a nadie; nací condenado. Te juro, Joaquín... ¡No jures! Te juro que si en mí solo consistiese, Helena sería tu novia, y mañana tu mujer. Si pudiese cedértela... Me la venderías por un plato de lentejas, ...
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Iré. Como regalo de boda mandó Joaquín a Abel un par de magníficas pistolas damasquinadas, como para un artista. Son para que te pegues un tiro cuando te canses de mí le dijo Helena a su futuro marido. ¡Qué cosas tienes, mujer!
Iré. Como regalo de boda mandó Joaquín a Abel un par de magníficas pistolas damasquinadas, como para un artista. Son para que te pegues un tiro cuando te canses de mí le dijo Helena a su futuro marido. ¡Qué cosas tienes, mujer!
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Una mujer que me quiera, digo. ¡Sí, te he entendido, una mujer que te quiera, sí! Porque como partido... Sí, sin duda eres un buen partido... joven, no pobre, con una buena carrera, empezando a tener fama, bueno.
Una mujer que me quiera, digo. ¡Sí, te he entendido, una mujer que te quiera, sí! Porque como partido... Sí, sin duda eres un buen partido... joven, no pobre, con una buena carrera, empezando a tener fama, bueno.
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Abel Abel Sánchez Abelín abuelo acabar acaso acre Adah adivinaba ahora alma amigo Antonia arte artista bebedizo beso bueno Caín de lord Cállate calló cariño ciencia clientela comprendo Confesión conocer corazón creer criada cuadro curarme debe decía decía Joaquín deja déjame déjanos demonio desprecio dibujos dice discurso dormido ello empezó enamorado enfermo entonces envidia eres escribía estoy fama fría gloria gusto hablar habría hermano hielo hija hijo de Abel honrado hubiera matado hubiese Jehová Joaquín Monegro lágrimas Leovigildo lepra llamaba lord Byron luego Luzbel madre maestro malo marido matado máteme Medicina médico mejor MIGUEL DE UNAMUNO Mira morir muerte mujer mundo nadie nieto novia oído ojos padre padrecito papá parece pasión pava real pensé peor perdonado pintar pintor pobre Joaquín preguntó quererte querido quita retrato saber salvarme sangre sentido suegro sufrir tenido tirria traed al niño verdad vete vivido odiándome volvió